POR
FELIPE ARGOTE
Debo confesar que me tomó más tiempo de lo
usual leerme esta novela de Vargas Llosa, más por falta de tiempo que por ganas
de seguir examinando la historia del nacionalista irlandés Roger Casement.
Noches de desvelo en donde, como el celta
Casement, me complicaba en la contradicción de seguir leyendo a las dos de
la mañana o irme a dormir para cumplir eficazmente mi trabajo del día
siguiente. Por supuesto que las contradicciones del cónsul británico
sentenciado a pena de muerte eran más complejos. Decidir entre seguir anglicano
o convertirse en católico como medida política, ya que en realidad era ateo. De
seguir siendo el cónsul declarado caballero por la reina de Inglaterra o conspirar
con los alemanes, en medio de la primera guerra mundial, para que los ayudaran en
el levantamiento armado que independizaría
a su amada Irlanda del dominio inglés.
Los celtas son grupos indoeuropeas llamados
así por su lengua común más que por su genética. Recordemos que en Europa la
constante era que se daban movimientos poblacionales con un gran número de invasiones
y migraciones que implicaban mezclas genéticas.
En el caso de Irlanda los primeros celtas
ocuparon la isla en el año 1600 A.C. Estuvieron organizados en clanes en cuatro
provincias: Connacht, Leinster, Munster y el Ulster. Vivieron así por casi 20
siglos hasta que Enrique VII, de la dinastía Tudor, invadió Irlanda.
Dublin, su actual capital, fue fundada por
Ivar Ragnarson (the boneless) o Ivar el deshuesado, el más cruel de los hijos
de Ragnar Lodbrok, el legendario rey vikingo quien se consideraba descendiente
directo del Dios Odin, casado dos veces con dos míticas guerreras vikingas Skjaldmo
Lathgertha y la reina Aslaug.
En la novela histórica de Mario Vargas
Llosa, Roger Casement tiene tres etapas en su vida. Sus
inicios a los 19 años
como funcionario inglés, que lo llevó a ser cónsul, nombrado caballero. Vivió
por 20 años en el Congo Belga donde denuncio las atrocidades que se efectuaban
contra la población local por parte de las compañías belgas.
La segunda parte de su vida se desarrolla cuando
fue enviado al Amazonas peruano a investigar las denuncias de las atrocidades de
la Peruvian Rubber Company, empresa peruana de capital británico, contra los indígenas
huitotos, ocainas, muinanes, nonuyas, andoques, resigaros y boras, varios de
los cuales fueron totalmente exterminados
La tercera parte en la vida de Casement fue
cuando a su regreso a Irlanda relaciona cada vez más el colonialismo inglés
salvaje de África y Sur América, con el colonialismo en su propia nativa
Irlanda sometida durante siglos por los británicos.
Casement, con el peso de su prestigio de denunciar
maltratos y atrocidades en otros continentes, se involucra en la denuncia de la
colonización de Inglaterra en Irlanda y se enrola en el proyecto de sublevación
armada para la independencia. El ex cónsul Impulsa el proyecto de aprovechar la
primera guerra mundial, en donde Inglaterra y Francia junto con otros países, se
enfrentan a una alianza liderada por Alemania, para impulsar un acuerdo en que Alemania
le brinda armas a los irlandeses. Luego de la entrega fallida el revolucionario
llega a Irlanda en un submarino alemán. Casement desembarca en la playa de
Banna en el condado de Kerry, al este de Irlanda donde es apresado en el
llamado fort McKenn, luego denominado Fort Casement. La sublevación de pascua
fue derrotada por la devastadora superioridad de fuego del ejército inglés. Casement es ahorcado en Inglaterra el 3 de
agosto de 1916. Dado el, prestigio del nacionalista irlandés además de acusarlo
de traidor, se hizo necesario acusarlo por un mal mucho mayor, ser homosexual.
Se le negó después de muerto su traslado a su tierra natal hasta 1965. A su
llegada a Irlanda, casi 50 años después, su féretro fue recibido por cientos de
miles de personas y se le dio un homenaje militar frente al edificio histórico
de correos, sede del alzamiento de pascua de 1916.
Mario Vargas Llosa, ganador del premio Nobel
de literatura en los tiempos en que todavía se otorgaba a grandes escritores y
verdaderos genios de la literatura, nació en Perú el 28 de marzo de 1936. Sus
publicaciones incluyen la Ciudad y los Perros, Pantaleón y las Visitadoras, Historia
de Mayta, La Fiesta del Chivo, entre muchas.
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