Elblogdefelipeargote XVI TEMPORADA: POBREZA Y EDUCACION

19 de febrero de 2014

POBREZA Y EDUCACION

Por: Felipe Argote

Reiteradamente vemos a los gobernantes ufanarse que Panamá es un país rico, sin embargo, uno de cada

Foto: La Estrella de Panamá

cuatro panameños se acuesta con hambre. Según cifras del MEF en su estudio pobreza e indigencia el 25.4% de los panameños es pobre y un 10.4% vive en la indigencia, o sea no cubre ni siquiera sus necesidades de alimentación. En las áreas rurales la mitad de los panameños son pobres y un 24% vive en pobreza extrema.

Lo execrable es que la tendencia no es a la baja. A pesar de las espectaculares cifras de crecimiento que presenta el PIB, en las áreas indígenas la pobreza en general y la pobreza extrema vieron un incremento en los últimos años y en las áreas urbanas la reducción no fue significativa. Esto demuestra que la sola política de subsidios no ha tenido mayor efecto para romper el círculo de la pobreza, aunque sí ha servido para ganar adeptos políticos y disfrazar temporalmente las cifras.

Panamá sigue siendo uno de los países con mayor nivel de desigualdad en el planeta. No es necesario compararnos con los países desarrollados para demostrar esta calamidad. Argentina, Chile, Uruguay, Costa Rica, México y hasta Brasil que hace poco nos disputaba el lugar como países con peor distribución de la riqueza en Latinoamérica hoy nos supera. Brasil, según cifras confiables del Banco Mundial posee un 27% de pobreza y un 15% de indigencia, México tiene un 24% de pobreza y un 9% de indigencia, El vecino Costa Rica, con una población parecida a la nuestra, posee un 20% de pobreza y un 8% de indigencia, Chile posee apenas un 12% de pobreza y 4% de indigencia, Uruguay también con una densidad de población similar a la nuestra, tiene un 11% de pobreza y apenas un 3% de indigencia, Argentina solo tiene un 7% de pobreza y un 3% de indigencia mientras Panamá según cifras del Banco mundial tiene un 33% de pobreza y un19% de indigencia.

Gran parte de esta situación tiene que ver con la educación. Basta ver los resultados de la prueba internacional para la evaluación de estudiantes, conocida por sus siglas en inglés como prueba PISA. Esta es una prueba elaborada para los miembros de la OECD, organización para la cooperación y desarrollo económico, casi todos países desarrollados, en donde pueden participar países no miembros para ser evaluados. Panamá participó en la prueba en 2009. De 60 países participantes Panamá quedó de 58 en lectura, 60 en matemáticas y 58 en ciencias. En la siguiente prueba que se celebró en el 2012 simplemente el Ministerio de Educación decidió no participar.

La indiferencia en el plano educativo de los últimos gobiernos al no dedicarle el presupuesto necesario a la

educación es un factor determinante en que no se reduzca el nivel de pobreza. Las últimas escuelas construidas distan de la década del setenta, salvo las pocas escuelas edificadas en el último periodo que por alguna razón enigmática se encuentran muy lejos de los centros de concentración de los estudiantes. El mismo edificio del Ministerio de Educación provoca lástima de lo deteriorado que se encuentra.

En nuestro país el presupuesto dedicado a la educación no cumple en lo más mínimo con las necesidades de los colegios. Mientras Panamá le dedica el 3% del PIB al presupuesto educativo, 3.8% si se incluye beca universal, Costa Rica le dedica casi el doble, con el agravante que ellos si poseen escuelas construidas, mientras en Panamá los colegios más representativos se caen a pedazos. Para maquillar la situación los gobiernos siempre afirman que posemos uno de los presupuestos educativos más altos del área, lo que no dicen es que al área se refieren a Nicaragua, El Salvador, Guatemala y Honduras, países con mucha menor riqueza que la nuestra y un panorama mucho más desalentador. Panama es el quinto país con peor presupuesto educativo en Latinoamérica, solo superado hacia la baja por El Salvador, Guatemala, Perú y Honduras.

Actualmente un maestro en Panamá entra al sistema con un salario de 550 balboas. Una trabajadora doméstica inmigrante gana lo mismo o más, un conductor de metro bus entra con 700 dólares mensuales. Estos es 150 dólares más que una maestra, un albañil gana 750 dólares, un trabajador manual que labore en una zona franca gana un salario de mínimo de 625, igual que una empleado de oficios generales de un banco. Esto es cien dólares más que un maestro.

Los colegios ya no soportan el peso de los años de uso de tres turnos de estudiantes, mañana, tarde y noche durante más de 30, 40 y mucho más 50 años de severo deterioro, Los colegios secundarios quedan a decenas de kilómetros de los estudiantes. Mientras los estudiantes viven en Chilibre, Tocúmen y Chorrera, los colegios quedan en Punta Paitilla donde no vive uno solo de los estudiantes matriculados.

Ante la falta de liderazgo y formación de manejo de crisis de los mal apagados y pésimamente formados directores de colegios la respuesta es cargar con las policía, golpear y esposar a los estudiantes a despecho de si son o no miembros del cuadro de honor.

Las horas de clases de los estudiantes son la mitad de las que toman los de los mejores colegios privados porque también los hay malos, debido a que en los colegios públicos hay que sacar a los estudiantes del salón para que entren los del siguiente turno.

Si no se le dedica el presupuesto que requiere la educación pública, si no se construyen colegios de calidad en donde viven los estudiantes, si no se les paga a los buenos profesores lo que corresponde seguiremos teniendo maestros y profesores mediocres y jóvenes sin poder romper el círculo de la pobreza.

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